Sócrates utilizaba la ironía para hacer comprender a los demás que no sabían tanto como creían, o que sus ideas no tenían por qué ser las más apropiadas. Les lanzaba preguntas que normalmente les hacía reflexionar y tomar conciencia de que era posible que estuvieran equivocados, y dejaba que encontrasen las respuestas por sí mismos. Era el método de la "mayéutica", que significa en griego "dar a luz"; dar a luz un nuevo conocimiento. Se dio cuenta de que ayudaba mejor a sus alumnos a través de sus preguntas y dejándoles llegar por sí mismos a sus propias conclusiones que dándole él directamente las soluciones. Así era como llegaban al conocimiento.
Cada uno de nosotros debe encontrar sus propias respuestas, sus propios objetivos, sus metas. Cada uno de nosotros debemos encontrar un camino por el que deslizarnos con facilidad.
Sócrates decía que él no podía enseñar, sino ayudar a buscar el conocimiento dentro de "vosotros mismos". Tenemos que aprender a aprender.
Debemos pararnos a reflexionar para descubrir cuál es o va a ser nuestro objetivo y, una vez conseguido, hacer la planificación que nos llevará a su logro. Después, debemos actuar.
Cada uno de nosotros debe encontrar sus propias respuestas, sus propios objetivos, sus metas. Cada uno de nosotros debemos encontrar un camino por el que deslizarnos con facilidad.
Sócrates decía que él no podía enseñar, sino ayudar a buscar el conocimiento dentro de "vosotros mismos". Tenemos que aprender a aprender.
Debemos pararnos a reflexionar para descubrir cuál es o va a ser nuestro objetivo y, una vez conseguido, hacer la planificación que nos llevará a su logro. Después, debemos actuar.
"Sin acción no hay consecución"
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